El hecho se registró el pasado 20 de mayo en el Centro Familiar de Adoración del barrio Zeballos Cué de Asunción.
El fiscal Marcelo Conigliaro acusó y pidió juicio oral y público para Sandra Solís (47), procesada por haber supuestamente manoseado en sus partes íntimas a una niña de tres años de edad dentro del Centro Familiar de Adoración de Zeballos Cué.
La acusación por abuso sexual en niños (artículo 135 del CP, incisos 1° y 2°, numeral 3) y violación del deber del cuidado fue presentada el sábado 2 de diciembre, día en que venció el plazo investigativo de la Fiscalía.
El juez de la causa, Hugo Sosa Pasmor, debe fijar una fecha para realizar la audiencia preliminar. De acuerdo con el escrito fiscal, el hecho ocurrió el 20 de mayo, entre las 9:00 y las 11:00, dentro del baño del CFA, ocasión en la que la mujer habría manoseado los genitales de la víctima.
La acusada, a quien los niños llamaban tía, se encontraba ese día a cargo de los menores quienes iban todos los sábados para recibir educación religiosa, además de realizar otras actividades relacionadas como juegos, cantos y pintura.
La madre de la víctima la retiró del local a las 11:00, ya que esta lloraba bastante. Ya en su domicilio, la niña seguía llorando y se quejaba de dolor en su entrepierna e incluso tenía dificultades para caminar. La señora le revisó y encontró sangre seca en su ropa interior.
La mamá le preguntó a su pequeña qué le había pasado y esta le respondió que la “tía” la llevó al baño y le tocó. Inmediatamente, la llevó al centro de salud de Zeballos Cué y el médico que la atendió le confirmó que la menor fue manoseada en sus partes íntimas.
La derivaron al Hospital Materno Infantil de Loma Pytã, donde el médico de guardia ratificó el abuso. La señora fue a realizar, luego, la denuncia en la Comisaría 23° de Asunción, y posteriormente se derivó el caso a la Fiscalía.
El 1 de junio pasado se realizó en el Palacio de Justicia de la capital la cámara Gesell, donde la niña reiteró que la tía le hizo “naná” y que la tocó con su mano. Al día siguiente, la víctima y la acusada se encontraron en la Fiscalía de Zeballos Cué y la nena empezó a llorar y a esconderse detrás de su mamá a quien le dijo que ella fue la que le tocó.
Vía: JUDICIALES.NET
