Desde entonces, ya se sabe: todo el mundo compartiendo la imagen y haciendo todo tipo de comentarios.
El caso de Bob nos remite a una famosa investigación del sicólogo Michael Roy (de la Universidad de California en San Diego), quien indagó sobre la creencia popular de que realmente los perros suelen parecerse a sus dueños.
Le había llamado la atención que los hombres musculosos paseaban perros grandotes, mujeres rubias caminaban con perros con pelo parecido, etc.
Supuestamente, la explicación es que los humanos tendemos a elegir mascotas parecidas a nosotros mismos.
Es la misma conclusión a la que llegó el sicólogo japonés Sashiko Nakajima, de la Universidad Kwansei Gakuin. A propósito, John Travolta es otro que eligió un perro que le asemeja muchísimo, fijate:
Fuente: Extraapareció el perro de Travolta. Listo, se supo. pic.twitter.com/O7NCNDSb9Z— Chris Alonso (@Chris_Alonso) 14 de enero de 2016